La Biblia en orden cronológico

La Biblia en orden cronológico es una edición única y original del texto bíblico. Como su nombre lo indica, esta Biblia está organizada no en libros individuales, sino en una sola línea de narrativa continua desde el origen de la creación hasta las sorprendentes visiones que Juan recibió en la Isla de Patmos.

El Dr. F. LaGard Smith, compilador de esta Biblia, realizó diversas investigaciones históricas para organizar el texto lo más apegado a su orden cronológico.

Énfasis en la cronología

Es verdad que la Biblia es una colección de libros con diversos estilos literarios, y cada uno tiene un propósito específico. Esta obra no intenta contradecir esto. Más bien, el aporte de este trabajo apunta a resaltar la unidad del mensaje de toda la Biblia como una gran historia.

De esta manera, para la mente occidental, más acostumbrada a una presentación cronológica de los hechos, resulta de gran ayuda poder leer de manera continua toda la narración sin saltos discontinuos ni repeticiones de la historia previa.

Toda la historia bíblica aparece dividida en doce etapas clave, y se van incluyendo notas cuando es necesario aclarar que no se tiene la información suficiente para establecer una fecha exacta de ciertos acontecimientos.

Formato devocional

Además, esta obra está dividida en 365 secciones más o menos de igual proporción, pensando en que se pueda leer en el transcurso de un año.

Dos elementos más completan el formato de esta Biblia: El texto aparece dividido en párrafos y no en capítulos. Todo párrafo tiene al margen la cita bíblica correspondiente. El segundo elemento es la inclusión de notas narrativas de preparación o introducción al texto en momentos clave. Estas notas se intercalan con el texto, pero están claramente indicadas (sombreadas de gris) para poner al lector sobre aviso de que se trata de notas añadidas por el compilador.

Esta Biblia es una excelente opción para fomentar el hábito de la lectura devocional; y además proporciona un gran panorama histórico de toda la Biblia. No debe usarse para estudiar un libro en particular, sino para tener un panorama de la narración que corre por toda la Biblia: la promesa y llegada del Mesías Jesús.