El libro de Apocalipsis ha despertado mucha intriga a lo largo de los siglos. Sus descripciones de bestias, guerras y muerte; sus relatos de acontecimientos escalofriantes; y su uso de símbolos diversos como colores, números y criaturas celestiales (o infernales)… todas estas características lo convierten en un libro que despierta la fascinación de todo tipo de lectores.
La historia da testimonio de las muchas lecturas posibles de Apocalipsis. Existen interpretaciones sumamente diversas e, incluso, contradictorias. Eso despierta las grandes preguntas: ¿Es posible comprender el verdadero mensaje de este libro? ¿Existe una interpretación de Apocalipsis que sea fiel a su mensaje y a la intención original del autor bíblico?
No cabe duda que para entender el mensaje de Apocalipsis se debe tener en cuenta que no es un libro aislado. Es parte de la colección de libros inspirados que conocemos como la Biblia. Por tanto, su mensaje debe aportar al mensaje total de la Biblia. No podemos tratar de analizar Apocalipsis ignorando el propósito y mensaje de los 65 libros que le anteceden.
Según John C. Kennington, «Apocalipsis tiene 404 versículos, pero tiene referencias a otros 518 textos de la Biblia.» (Apocalipsis). Esto significa que para comprender Apocalipsis es necesario comprender el mensaje global de la Biblia.
El evangelio: La clave para entender Apocalipsis
En su libro El Cordero y el León, Graeme Goldsworthy analiza este tema, llevando al lector a encontrar el enfoque de Apocalipsis, que es el enfoque de toda la Biblia. Goldsworthy propone que el evangelio es la clave para entender el mensaje y propósito de este libro profético.
El Cordero y el León no es un comentario bíblico, pues no hace análisis capítulo por capítulo. Más bien es un estudio hermenéutico y teológico para ayudar al lector a estudiar Apocalipsis desde la perspectiva del evangelio. Si Jesucristo es el personaje principal de toda la Biblia, ¿cómo es posible que existan interpretaciones de Apocalipsis donde Jesucristo no tiene el papel principal?
En efecto, el título mismo de Apocalipsis es «La revelación de Jesucristo» (Ap. 1:1). Todo Apocalipsis está lleno de descripciones de Jesucristo, quien aparece siempre como el personaje central: el Cordero, el que tiene en su mano las siete estrellas, el único digno de abrir los sellos, el hijo varón que estaba por nacer, etcétera. Él es quien dirige el mensaje a las siete iglesias, y quien hace posible revelar los siete sellos que contienen el mensaje profético de todo el libro.
Otro texto relevante es Apocalipsis 19:10, que registra la respuesta del ángel cuando Juan iba a rendirle adoración:
Entonces caí a sus pies para adorarle. Y me dijo: No hagas eso; yo soy consiervo tuyo y de tus hermanos que poseen el testimonio de Jesús; adora a Dios. Pues el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía. (LBLA)
El testimonio de Jesús y la adoración a Dios aparecen paralelamente, y después el ángel afirma que «el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía». Aunque la frase es algo ambigua, y las diferentes traducciones de la Biblia al español la entienden de manera distinta; podríamos aventurarnos a entender que el verdadero espíritu de la profecía recogida en Apocalipsis es dar testimonio de Jesús. Esto concuerda muy bien con el propósito de la Biblia como un todo: Dar testimonio de lo que Jesucristo ha hecho por nosotros. Esto es el evangelio, las buenas noticias.
Análisis teológico y consecuencias para la vida
El libro de Goldsworthy hace un meticuloso análisis, demostrando su tesis principal una y otra vez. Pero no se trata solo de una afirmación abstracta, pues hace un llamado al lector para vivir a la luz de la esperanza que nos da el evangelio. En especial enfatiza la esperanza del retorno de Jesucristo.
También las cartas a las siete iglesias y los himnos que aparecen en Apocalipsis son revisados, y nos llevan a una transformación en nuestras comunidades de fe, y como individuos. El autor analiza estos pasajes y nos presenta la aplicación para la vida cotidiana. Como iglesia universal, y como hijos de Dios, tenemos el llamado a vivir como una comunidad del evangelio y como adoradores del único Dios verdadero.
Un excelente punto de partida para el estudio de Apocalipsis
En resumen, el libro El Cordero y el León es un excelente auxiliar para entrar en el estudio de este libro bíblico que ha despertado tanta fascinación, miedo y confusión. El autor nos da una guía clara, sin códigos secretos ni recetas enigmáticas; más bien nos ofrece un camino seguro para interpretar Apocalipsis tomando en cuenta el mensaje global de la Biblia.
En realidad, cualquier libro de la Biblia debe estudiarse partiendo del mensaje global de la Biblia, y Apocalipsis no es la excepción. No es un libro escrito para unos cuantos expertos, es un mensaje para todos los creyentes de todas las épocas. Cuando tomamos en cuenta estos principios de interpretación podemos notar que Apocalipsis es un libro escrito para ser comprendido, para dar esperanza y para reafirmar nuestra fidelidad hacia nuestro Dios.
Es decir, su mensaje es accesible para nosotros, y contiene las buenas noticias que relatan la victoria de nuestro salvador. Por eso podemos afirmar con gozo y expectación:
«Amén. Ven, Señor Jesús.» (Ap. 22:20b)